Un podio para la perdedora
Lo peor de ser buena es que nunca sos demasiado buena. Nunca estuve en el podio. Bueno, si, una vez y sólo una vez. Cuando terminé la primaria fui escolta de la bandera, fui suplente porque a Natalia le bajó la presión…
Lo peor de ser buena es que nunca sos demasiado buena. Nunca estuve en el podio. Bueno, si, una vez y sólo una vez. Cuando terminé la primaria fui escolta de la bandera, fui suplente porque a Natalia le bajó la presión…